Sobre la Begonia Maculata

Inconfundible. La Begonia Maculata se distingue por sus grandes lunares plateados, por tener el envés de sus hojas burdeo y brotes en color mostaza. ¡Espera a ver su impresionante floración! Relativamente fácil de cuidar, crece bastante rápido y es fácil de reproducir.

Luz: Una buena iluminación ayudará a que esta planta no solo crezca más frondosa y rápido, sino que también la vuelve más resistente. Con una buena iluminación tolera bien las fluctuaciones de riego y evita las plagas. Nunca debe recibir sol directo.

Agua: Requiere riegos medios como para mantener el sustrato “ligeramente humedo” pero nunca debe encharcarse. Regar cuando la tierra se empiece a ver seca por arriba, pero siempre con el drenaje abierto (en el caso de tener tapón).

Humedad: Esta planta no tiene requerimientos de humedad muy altos, por lo que debería estar bien en interiores. Por el contrario, si le perjudica estar en terrazas expuestas al viento seco de verano.

Cuidados: No tolera sol directo ni heladas. Es una planta de interior. El mayor cuidado es ir podando a medida que crezca para que mantenga la forma y tamaño que deseamos. Uno de sus principales problemas es el polvillo blanco que es un hongo llamado oídio, el cual se produce principalmente por falta de luz y encharcamiento.

Dato: Es muy fácil de reproducir. Cuando cortes tallos puedes dejarlos en agua por meses y posteriormente pasarlos a tierra.

Curiosidades: Desde primavera hasta finales de verano nos entrega bellisimas flores blancas con formas de campana. Para ayudarla a mantener de forma constante esta floración es ideal abonarla.